Seduce a la voz del infinito
tu voz de hada,
cantando entre besos y estrellas,
volando entre dimensiones
y serenando el espíritu
de quienes se dejan encandilar
por ti.
Tu luz llega a corazones ocultos
y enciende su chispa divina,
aportándoles una sensación de alivio
y de gratitud con el presente.
Me abrazas, mi hada, con tu resplandor estelar
y me colmas de bendiciones,
regalándome la belleza de este instante.
Irradias destellos de armonía
que abrazan mi alma con ternura,
mientras tu aleteo se posa en mi corazón
y me recuerda que permanecerás siempre conmigo,
compartiendo un amor sin condiciones
y dejándome promesas de fantasía y de magia.