viernes, 20 de noviembre de 2009

Cuento del hada y la mariposa




Érase una vez una mariposa que no podía volar, por más que lo intentaba le resultaba imposible, sus alas se habían quedado bloqueadas al igual que sus ilusiones. Nada dels hermoso valle donde vivía tenía sentido para ella: ni las flores, ni el riachuelo ni los frondosos árboles.

Se sentía tan frustada que ni tan siquiera tenía fuerzas para volar sin rumbo, simplemente, había dejado de volar y empezó a llorar pues había dejado de sentirse libre. Pero un hada recogió sus lágrimas y le prestó sus alas para que la mariposa emprendiera un nuevo camino en su vida y siguiera volando y sintiendo la agradable sensación del roce del aire en el cielo de las montañas. La mariposa quedó tan agradecida que nunca dejó de creer en las hadas ni en sí misma.


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sábado, 14 de noviembre de 2009

Tu hada te sugiere...










Es un ser lleno de luz y de belleza interior,
predestinado al éxito,
parece un ángel
que ha nacido para descubrirse a sí mismo
e implementar su potencial interior
en el mundo.

Está predestinado a ser aquello para lo que nació
y a demostrar el poder de su fe,
de sus habilidades y de esa paz especial
que ilumina su alma y su mirada.

Merece la oportunidad de ser él mismo,
de desplegar el encanto de su magnetismo
e ir sembrando el camino de sus sueños
en forma de acciones y de huellas
ancladas en el momento presente.

Esa criatura merece ser tocada por el corazón de un hada...

¡Podrías ser tú!

sábado, 7 de noviembre de 2009

Sigues ahí, mi hada


Te escapas de mis pensamientos

y te posas en mi cabeza,

contemplando mi mundo

hasta que te percibo

y emprendes el vuelo,

enredándote en mis cabellos.

Sin embargo, tu luz se queda conmigo

y tu magia me descubre momentos fugaces

de plena conexión con la unidad del mundo.


Entonces me siento yo misma,

en sintonía con mi entorno

y en armonía con el ritmo que fluye

sereno y vital.


Me recreo con tu presencia

con alegría e ilusión

pues tus matices sutiles y bellos,

envuelven mi alma

de una sensibilidad

que me fascina y me colma.


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