martes, 31 de diciembre de 2019

Agradecimiento a hadas y ángeles

Me envuelve la energía de las hadas. Es suave, ligera, alegre.

La atmósfera está impregnada de luminosidad y de serenidad.


Mi corazón se abre y renace. Se han curado todas las heridas.

Todo me resulta nuevo, fresco, cristalino. Todo me parece uno.

Percibo el palpitar de la vida, el pulso de la existencia, el ritmo instintivo que nos mueve a ser nosotros mismos: auténticos, sin miedo.

Me siento arropada por ángeles y hadas. Lo agradezco infinitamente.


Permanezco en esta sensación de flotación, de bienestar.

Autora texto e ilustraciones: María Jesús Verdú Sacases
Técnica ilustraciones: Acuarela, pastel
Licencia de Creative Commons

sábado, 28 de diciembre de 2019

Cierro los ojos cerca de las hadas


Cierro los ojos en posición de meditación y respiro profundo.


Me siento bendecida por el canto de los pájaros al atardecer, por la presencia invisible de hadas, elfos, duendes y gnomos y por el estallido de vida que nace del vientre de la madre naturaleza.

Me cuesta encontrar palabras para describir mi interior: dicha, calma, gozo son sólo conceptos que se acercan a lo que significa simplemente ser, realidad sin pensamiento, pura presencia de ser, sin nada más que añadirle. Incluso la palabra celestial no abarca este estado que me embelesa, este estado de conciencia, esta serenidad donde todo es perfecto, completo por sí mismo tanto, que no hay necesidad de nada, ni tan siquiera es necesaria aquí la magia de las hadas.

Todo es vibración de paz, de alegría, haces de luz.

He perdido la noción del tiempo.

Simplemente, soy.

Autora texto e ilustraciones: María Jesús Verdú Sacases
Técnica ilustraciones: Pastel
Licencia de Creative Commons

jueves, 26 de diciembre de 2019

La vibración de las hadas

Las hadas me acompañan hoy.
Su presencia irradia serenidad y sonrisas.
Su alegría me abraza.

Entre bailes y juegos me muestran
la luz, la magia
y me invitan a soñar
un mundo mejor.



Me dejo llevar
por este baile peculiar
cuyo ritmo lo marcan
los latidos del corazón.

La vida que anima el momento presente
se apodera de mí
y me enraiza en el ahora.

No pienso en el mañana,
me enfoco en cada paso del baile
y poco a poco
voy adentrándome en mí misma.
La paz me embarga.

Siento el palpitar de la existencia,
la dicha sin fin del sentido de ser,
simplemente ser.

Aquí todo vibra,
todo desprende amor y belleza.
Pero ¿de dónde emana,
dónde está la fuente, el origen?
Eso debo descubrirlo yo.

Texto e imágenes: María Jesús Verdú Sacases
Técnica ilustración: acuarela
 Licencia de Creative Commons

miércoles, 25 de diciembre de 2019

Energía divina, hadada


Ángeles y hadas dejan caer
luces de amor y paz
desde el balcón del Universo,
como si fueran guirnaldas
que decoran e iluminan el mundo.
Transmiten una sensación de dicha
que vibra y me recorre el alma,
directa al corazón.




Bendicen a todos aquellos
que reciben esta energía
divina, hadada.



Las hadas observan
con sus risas y dulzura
los sueños de niños
y de adultos de buen corazón.
Les envían su magia, 
cuando despiertan
para que sus mejores sueños
cobren vida
y tomen forma en el presente.

Autora texto e ilustraciones: María Jesús Verdú Sacases
Técnica ilustraciones: Pastel

Licencia de Creative Commons

lunes, 23 de diciembre de 2019

Corazón de hada

Mi hada,

Juegas con las estrellas y la luna. Por la noche te disuelves en el cielo nocturno. Al amanecer naces con tu sonrisa traviesa y tu luz de vida.


Siento tus risas resonar en mi pecho y te busco, complacida de tenerte cerca. Tu magia me rodea,  mientras tus alas me elevan a una vibración fresca, libre, cristalina, gozosa. Hay tal claridad tal que los sentidos no pueden dármela. ¿De dónde proviene?

Correteas en mi mundo y te columpias en el espacio que fluye entres mis pensamientos, justo en el que existe cuando acaba uno y empieza el siguiente pensamiento. En ese espacio mágico, te filtras en la nada, mientras la luz ilumina tu cara serena, tornasolada, invisible a la mirada humana pero sé que sigues ahí, como una presencia sin forma, sin palabras, desnuda. Y ahí todo es unidad, todo es paz, nada importa. Habito en eso. Lo haría toda la eternidad: morar en ese algo indescriptible, hadado, vibrante, vital, consciente, impregnado de divinidad, de claridad. Algo donde lo celestial muestra su verdadero rostro.     

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Autora texto e ilustraciones: María Jesús Verdú Sacases

 

Técnica ilustraciones: Pastel