domingo, 10 de junio de 2018

Meditación con las hadas

Después de algún tiempo, regreso con mis escritos y dibujos sobre las hadas y otros elementales de la tierra, que, con su presencia invisible, nos acompañan en el camino. Dispongo de poco tiempo. Cualquier cosa, podéis contactar conmigo por E-mail: mjesusvs@gmail.com. Un placer reencontrarme con todos vosotros. Os añoraba.  

Mi hada,
en meditación
te siento como una leve brisa,
acurrucada en mi alma.

Tu vuelo me lleva
más allá de mis pensamientos
hasta que nos fundimos en un vacío
donde incluso tú desapareces
pero seguimos presentes aquí
en el latido de cada instante.

Habito en una dicha indescriptible,
desposeída de mi personalidad,
de mis miedos,
de los conceptos.
Vacía de mí.

Hadas, elfos, duendes y gnomos
danzan al compás
de la melodía del silencio.
Sus alas les elevan por encima
de sí mismos
y nos encontramos
en un estado sin rostro, sin tiempo,
que lo presencia todo
sin ser nadie.

Reina el vacío
en este reino de ningún lugar,
indiviso, completo, sujeto a nada
cuya llave está en el interior,
a tu alcance.

Entre risas y asombro,
extasiada,
embelesada como los niños:
renazco empapada de gozo,
de amor sin expectativas, sin razones,
ser por el mero hecho de ser,
de fluir en libertad en estado puro.


El rocío baña las flores del ser
como agua bendita de
vida, vibración, amor,
magia, luz, divinidad
manando de la fuente,
origen de todo.

La música celestial
me recorre, me bendice
y me enraiza en el presente.
Notas tañidas en el ahora...

Autora texto e imágenes: M. J. Verdú
Técnica ilustraciones: Pastel 
Licencia de Creative Commons